Sabemos que los trabajadores ineficaces están presentes en todos los niveles de la empresa, desde los más básicos hasta los puestos de alta responsabilidad. En ocasiones algunos de ellos incluso tienen la increíble habilidad de disimular su falta de competencia para pasar los estrictos filtros que ponen los departamentos de Recursos Humanos.

Por el otro lado, también tenemos empleados que están sobrecalificados para su puesto debido a sus grandes capacidades para desempeñar sus actividades, así como su destreza e iniciativa. Aunque pudiéramos pensar que este empleado puede traer grandes beneficios a la empresa, los resultados a largo plazo pueden ser totalmente lo contrario, principalmente porque estos individuos terminan por sentirse estancados en su desarrollo profesional. Respecto a esto, Francis Beltrán, director de Consultoría de Hay Group México, asegura que una de las principales tareas de las empresas es identificar estos talentos perdidos, que son más que capaces de ayudar al crecimiento en la empresa.

Por eso es importante dar opciones para que los empleados incompetentes sean identificados y corregidos, a la vez que se encuentra a los más preparados para asignarles trabajos acorde a sus aptitudes y aspiraciones profesionales.

Primero veamos qué puntos negativos fomentan la presencia de un empleado incompetente en la empresa:

• Choque entre la filosofía institucional y del empleado: Muchas veces la persona tiene la aptitud y formación que requiere el puesto, pero sus creencias personales no encajan con la cultura de la empresa, afectando su motivación.
• Procesos de selección erróneos: Algunos organismos incorporan a una persona en un determinado puesto por lo que es, y no realmente por lo que sabe. Por eso es importante darle herramientas a los reclutadores para identificar con precisión a los malos aspirantes.
• Falta de formación: La incompetencia puede producirse si a un empleado se le exige cumplir con ciertos objetivos cuando claramente carece del conocimiento y experiencia necesarios para cumplirlos, cayendo en este caso la culpa sobre sus superiores.
• Ambiente laboral: Se trata de la ansiedad y estrés generados por un clima institucional de alta presión o nulo reconocimiento, mermando el deseo de los empleados por alcanzar y superar su objetivos.

Ahora revisemos los factores a considerar parar los colaboradores sobrecalificados en la organización:

• Poca atención al personal: Es vital instruir a todos los gerentes y líderes para identificar los individuos en sus equipos que sobresalen en sus tareas cotidianas.
• Utilizar herramientas de evaluación y preferencias: La aplicación de exámenes de competencias periódicamente evitará que los talentos se pierdan fácilmente en la variedad de equipos de trabajo en la compañía. También puedes ayudarte de herramientas psicométricas que te permitan conocer las expectativas del personal e identificar aquellos con mayores aspiraciones de crecimiento interno.

Identificar estos elementos es un problema olvidado por las organizaciones, evitando que generen sinergia para alcanzar objetivos con mayor efectividad y reduciendo la posibilidad de problemáticas internas. Recuerda que el potencial completo de una empresa siempre dependerá de su habilidad para gestionar su capital humano.