Anteriormente te hablamos de las tendencias en comunicación y procuración de desarrollo del capital humano de grandes corporaciones como BBVA Bancomer, Ikea, AXA o McDonalds; ahora haremos hincapié en una de las tendencias que se ha mantenido de forma sostenida en el radar de grandes empresas y que apunta a seguir creciendo y tomando fuerza, nos referimos a las universidades corporativas.

Si bien para las grandes empresas la comunicación interna es primordial, hay quienes priorizan la formación de sus colaboradores, y nada más y nada menos que gigantes como Disney, Apple, Coca-Cola, Pepsico y Volkswagen tienen sus propias universidades, institutos que responden directamente a resolver cuestiones del negocio y la organización a través del aprendizaje continuo de sus colaboradores.

¿Qué es una universidad corporativa?

Es una institución educativa interna de una empresa, para ofrecer formación, capacitación y aprendizaje continuo a sus colaboradores; al mismo tiempo que alinea sus conocimientos a los objetivos de la organización, resolviendo problemas puntuales del negocio.

Pueden manejar un gran número de cursos variados y de interés para los colaboradores, o bien, pueden acotarse a los cursos prioritarios que requiere la empresa.

La universidades corporativas, deben ofrecer diferentes modalidades que puedan adaptarse a los colaboradores. Desde su inicio a finales de los ochenta y a principios de los noventa, los cursos fueron impartidos en la clásica modalidad presencial, sin embargo, gracias a las nuevas tecnologías, el e-learning o la educación en línea, se han convertido en las herramientas por excelencia de las empresas que buscan capacitar constantemente a sus empleados; así también se tienen las modalidades semipresenciales, que combinan el e-learning y las clases tradicionales en el aula.

De acuerdo con Jeanne C. Meister, autora del libro Universidades empresariales, las compañías que tienen el modelo de la universidad corporativa, no sólo invierten en la resolución de problemas a través del aprendizaje de sus colaboradores, también lo hacen en una ciudadanía corporativa, pues apuestan fuertemente porque los empleados no sólo hagan de manera correcta su trabajo sino que comprendan el bien que le hace a la compañía, a sí mismos, y al cliente, cuando se desempeñan favorablemente; es decir, generan un verdadero sentido de la lealtad y la pertenencia.

Meister menciona que las universidades corporativas deben ofrecer las tres C:

• Ciudadanía corporativa: conocimiento sobre la operación de la empresa, sus valores y su visión.
• Contexto: conocer a los clientes de la empresa, a los competidores y sus prácticas.
• Competencias: practicar lo aprendido y lo ya conocido.

Para saber más

Si bien la empresa podría estar generando sus propias asignaturas, también existen alianzas entre empresas y universidades privadas o agencias que se dedican a la impartición y gestión del conocimiento especializado en los objetivos de las organizaciones; un ejemplo de ello es el caso de BBVA Bancomer, que en México trabaja de la mano con TEC Milenio y con el Colegio de Bachilleres, para ofrecer a sus colaboradores educación media superior ejecutiva y educación preparatoria.

El TEC de Monterrey también cuenta con su propia división dedicada a la creación e impartición de cursos para las universidades empresariales. Aunque otros medios como El País, señalan que una de las tendencias más fuertes hoy en día, es que los mandos medios y altos, sean capacitados en primer lugar y sean los encargados de capacitar a su personal y ser parte activa de su formación.

Todavía más lejos

En la actualidad, hay empresas que se perfilan como verdaderos garantes de conocimiento, buscando certificar ante las instituciones educativas estatales a sus universidades, al mismo tiempo que generan conocimiento que pueda servir a los empleados en su estancia en la empresa y todavía fuera de ella aportando valor a la empresa, reteniendo el talento y proyectándose a otro tipo de mercados, como el educativo.